María es el Arca de la Nueva Alianza - Parte 1 - Cuculmeca Apologética

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martes, 24 de abril de 2018

María es el Arca de la Nueva Alianza - Parte 1

Sin duda las sagradas escrituras tienen aspectos muy particulares, que se tienen que ver con el cristal de una lupa. Y es que como se sabe, existen las llamadas tipologías bíblicas, estas nos dicen básicamente que existen personajes, (Animados o inanimados) en el Antiguo Testamento que son “sombra” o “tipo” de personajes renovados en el Nuevo Testamento.


En pocas palabras es válido decir: “El antiguo testamento es sombra del nuevo testamento”. A continuación, tipologías ampliamente aceptadas por todos los cristianos:


1) Jesús es el pan vivo bajado del cielo. El “tipo” o “sombra” en el Antiguo Testamento es el maná que bajó del cielo y que alimentó al pueblo de Dios en tiempos de Moisés (Juan.6).


2) Jesús es el redentor del mundo y nuevo Adán. En este caso, la sombra en el Antiguo Testamento es Adán, el primer hombre, el pecador, y Jesús es el personaje perfeccionado en el Nuevo Testamento, el redentor (1 Corintios 15:22).


3) Jesús es el verdadero cordero de Dios que quita el pecado del mundo. La sombra en el Antiguo Testamento eran los corderos que eran sacrificados en la pascua por los judíos (Juan 1:29).


Existen otros más como que el diluvio universal era una sombra de lo que es ahora el bautismo, por el cual “somos salvados”, así como en tiempos de Noé se salvaron esas ocho personas, ahora todos somos llevados a tener una oportunidad a la salvación por medio de la nueva “Agua de salvación” que es el bautismo [1] (1 Pedro 3:21).


Así entonces en las sagradas escrituras existen “sombras” (de ahora en adelante sin comillas) del Antiguo Testamento que corresponden a María en el Nuevo Testamento. Mostrar las referencias en el Antiguo Testamento de la Virgen María con relación al Arca de la alianza va a ser el punto central de este escrito, tanto en su primera parte, como en su segunda parte.


Al encontrar las referencias claras de la similitud de María y el Arca de la alianza en el Nuevo y Antiguo Testamento se va a poder afirmar con certeza de que María es el Arca de la nueva Alianza.


Desarrollo

El fundamentalismo bíblico siempre hace la pregunta: “¿Dónde dice eso en la biblia?” Como que la biblia fuera un libro de definiciones literales de doctrinas y palabras. ¿Dónde sale que María fue el Arca de la Alianza? Sin duda esa pregunta la hacen con la intención de que le digas: “Mira Aquí en Mateo 30:1 dice: 

[1] ¡Y María, Arca de la Nueva Alianza de Dios ruega por nosotros!” 


Esto claramente no se va a encontrar en ningún lado de la escritura de forma literal.


El fundamentalismo bíblico, que espera que toda doctrina esté totalmente explícita en la biblia, falla en demasiados aspectos (que no van a ser tocados en este escrito de María como Arca de la Nueva Alianza). 

La biblia no da siempre doctrinas explícitas, no se va a encontrar “La Santísima Trinidad” en la biblia, pero si se encuentran el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, tampoco encontramos la palabra “Encarnación”, pero sabemos que el verbo se hizo carne en el vientre de María.


Es por estas cuestiones de que jamás se va a encontrar de forma explícita un lugar donde diga literalmente “María es el Arca de la Nueva Alianza”, sería una necedad creer que tal afirmación es inválida solo porque no sale literalmente en las sagradas escrituras.


Aclarado este punto, se va a demostrar bíblicamente que María es el Arca de la Nueva Alianza, pero no porque aparezca literalmente, sino que por medio de las tipologías bíblicas se va a observar claramente que el Arca de la Alianza es sombra de María, porque lo que contenía el Arca era sombra de Jesús.


Primero se analiza el caso de San Lucas, las analogías y relaciones que existen entre este capítulo del Evangelio y el segundo libro de Samuel que muestran una clara tipología entre María y el Arca.

Después (en la segunda parte del este escrito) se va a apreciar las similitudes del contenido del Arca de la Alianza que se nos muestra en Hebreos.9 en contraste con María.


Al final se analiza el pensamiento de Juan en los capítulos 11 y 12 del Apocalipsis, donde se cumple una profecía antigua del génesis.


Con todo el análisis sobre la mesa, se va a poder llegar a la conclusión tajante y taxativa de que María es el Arca de la Nueva Alianza. Pero bueno, dejémonos de palabrerías y vamos al asunto que nos concierne.

El capítulo 1 del Evangelio de San Lucas nos da un reflejo evidente en que se muestran las similitudes entre María y el Arca de la Nueva Alianza, de hecho, este Evangelio muestra muchísimas cualidades de María como que es la “Llena de gracia”, “Bendita entre todas las mujeres”, “Bienaventurada por siempre”.

Es hora de trasladarnos al antiguo testamento, ahí en el libro de Samuel tenemos que hay una procesión al Arca de la Alianza, sin embargo, hubo un pequeño “desvío” y el Arca se dirigió a casa de Obededom.

1) Ambas llegaron donde un Levita y se dirigieron a la misma región.

Sabemos que Obededom era Levita (1 Crónicas 16:5) y el Arca se dirigió hacia su casa.

(2 Samuel 6:10):
Y no quiso David que se llevase el Arca de Yahvé hacia él, a la ciudad de David, por lo cual la trasladó a la casa de Obededom geteo.

También vamos a observar que María se dirigió a casa de Isabel, que era esposa de Zacarías que también era Levita.

(Lucas 1:39-40)
En aquellos días, se puso María en camino y con presteza fue a la montaña, a una ciudad de Judá, y entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel.

En realidad, cualquiera podría decir que esta no es ni siquiera una coincidencia, debido a que muchas personas visitaban a sus familias, y muchas familias eran Levitas. De eso no hay duda, pero para entender por qué esto es una coincidencia hay que seguir viendo todas las similitudes entre 2 Samuel 6 y Lucas 1 debido a que evidentemente con una sola coincidencia (que ni parece coincidencia por ahora) no se puede fundamentar el hecho de que María sea el Arca de la Nueva Alianza, sin embargo, por el momento quedémonos que solamente esta similitud no es prueba suficiente.

2) Ambas [2] santificaron el lugar del levita a donde llegaron.

Veamos como cuando el Arca de la Alianza llega a casa de Obededom esta santifica totalmente el hogar de este.

(2 Samuel 6:12)

Dijeron al rey David: “Ha bendecido Yahvé a la casa de Obededom y a todo cuanto tiene, por causa del Arca de Dios.” Entonces fue David, y con gran júbilo trasladó el Arca de Dios desde la casa de Obededom a la ciudad de David.

También hay que notar que María llena del Espíritu Santo a Isabel cuando le llegó (a Isabel) el saludo de María. Obviamente en ese momento los que estaban ahí quedaron benditos.

(Lucas 1:41)
Así que oyó Isabel el saludo de María, exultó el niño en su seno, e Isabel se llenó del Espíritu Santo.

Obviamente la mujer santa santifica al marido y el marido santo santifica a la mujer, por tanto, toda la casa de Isabel quedó llena del Espíritu Santo, incluso el fruto del vientre de Isabel, que era Juan Bautista.

3) Ambas fueron dignificadas [3] con una pregunta muy similar.

Veamos como David hace una pregunta muy similar a la que Isabel le hace a María.

(2 Samuel 6:9)
Atemorizóse entonces David de Yahvé y dijo: “¿Cómo voy a llevar a mí el arca de Yahvé?”
De forma similar, cuando María llega a casa de Isabel, y llena del Espíritu Santo por el saludo de María, Isabel expresa una pregunta.

(Lucas 1:43)
“¿De dónde a mí que la madre de mi Señor venga a mí?

Ahora si ya podemos ver coincidencias que, incluso, ¡hasta parecieran intencionadas por el autor!, sin embargo, esas no son todas, vamos a ver una más.

4) Ambas permanecieron el mismo tiempo en la casa del levita.

Veamos cuánto tiempo pasó el Arca de la Alianza en casa de Obededom.

(2 Samuel 6:11)
Tres meses estuvo el arca de Yahvé en casa de Obededom de Gat, y Yahvé le bendijo a él y a toda su casa.

Ahora veamos cuanto tiempo pasó María en casa de Zacarías.

(Lucas 1:56)
María permaneció con ella como unos tres meses, y se volvió a su casa.

5) Alegría con la llegada de ambas.

Los paralelismos continúan cuando se hace notar la alegría del encuentro entre ambas mujeres, tanto que el niño Juan Bautista salta de emoción.

Lucas 1:41
En cuanto oyó Isabel el saludo de María, saltó de gozo el niño en su seno, Isabel quedó llena del Espíritu Santo.

Así como David saltaba de emoción ante el arca

2 Samuel 6:16
Cuando el arca de Yahvé entró en la Ciudad de David, Mical, hija de Saúl, que estaba mirando por la ventana, vio al rey David saltando y girando ante Yahvé y le despreció en su corazón.

¿Increíble no?

Conclusión

Totalmente impresionante como el escritor San Lucas ha tenido en cuenta este episodio del segundo libro de Samuel, en donde se describía una procesión del Arca de Yahvé, sin duda, todas estas similitudes mostradas no dejan en mentira el hecho de que San Lucas estaba pensando en el arca del antiguo pacto para describir la historia de María en su primer Capítulo.


En la parte del estudio griego (tercera parte de estos post) se va a observar que Lucas no solamente tuvo en mente el segundo libro de Samuel para su relato, sino también los libros de Crónicas.

[1] Hágase notar que no se está diciendo que el bautismo es lo único que se necesita para la salvación, sino un requisito primordial (Aunque el que muere sin el bautismo, digamos un niño en el parto, está a disposición de la misericordia de Dios).

[2] Dios por medio de ellas.

[3] Entiéndase por dignificada al hecho de darle su lugar totalmente santo por favor de Dios.

Dios te bendiga,

Por: Cairo - Cuculmeca

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